martes, 15 de septiembre de 2009

La mariposa y el viento


-“Tendré que dejar de verte”, le dijo la mariposa al viento.
-“¿Y eso por que razón?” Preguntó
él con dudas en los ojos.
-“Porque no puedo refrenar este deseo
de abrazarte y hacerte mío inhalando
tu perfume gota a gota y penetrando en
cada oculto misterio de tu piel.”
-“No, por favor, no lo hagas,”
Dijo el viento en un suspiro lastimero.
“No dejes de venir a estar conmigo
tocándome con la ternura de tus lánguidas alas.
Quiero verte cada día porque me has atrapado en tu vuelo.”
-“Es imposible este amor mi amado viento,
porque la fuerza de tu encanto me lastimaría.
Y tú también sucumbirías al verme herida;
a pesar de que me encanta que me despliegues
las alas con tus manos mágicas, debo decir adiós mi bien amado.”
-“Por favor mariposa mía no te vayas, que necesito del brillo
de tu vuelo, de tu sonrisa y de tus manos chiquitas.”
-“Adiós querido mío. Empújame lejos con tu poderoso suspiro
y deja que muera por no tenerte…”

No hay comentarios:

Publicar un comentario